El nacimiento de un míto
El C63 W204 es el coche con más experiencia de los tres. Fue estrenado en 2005, cuando Mercedes-Benz equipó el icónico motor 6.3 V8 atmosférico en el C63 y en otros modelos de la marca, clásicos de Mercedes como podrían ser el S63 AMG o el ML63. El primer C63 AMG supuso una revolución en Mercedes hasta el punto que muchos lo catalogan como la mejor generación de la historia de la marca alemana. Este modelo estaba disponible en tres carocerías: berlina, coupé y familiar, caja automática manual o automática (7G-Tronic) y con 457CV de potencia que para aquel entonces era una barbaridad.
Un toque de radicalidad
Posteriormente, en el 2011, el C63 fue renovado a partir de un restyling añadiéndole pequeños cambios en la carrocería junto con algunos cambios en la electrónica. Sin embargo, también fue en el 2011 cuando Mercedes lanzó un modelo emblemático: el C63 Coupé Black Series. Este coche contaba con extras exteriores como puede ser su imponente alerón trasero o los flaps frontales que lo hacía ver más deportivo. A nivel interior ofrecía solo los dos asientos delanteros para poder disfrutar de sus 517CV dentro circuito.
El C63 adaptado a los nuevos tiempos
El C63 W204 siguió su producción hasta 2015 y fue en el año siguiente cuando se lanzó el nuevo C63 en versión berlina, coupé, familiar y la novedad de la opción cabrio. El nuevo modelo montaba la carroceria W205, que ofrecía un diseño vanguardista y elegante y un interior completamente renovado y mucho más acorde a la marca. El nuevo C63 estaba armado esta vez con un motor 4.0 V8 biturbo que ejercía 476CV y un par motor de 650Nm y aceleraba de 0 a 100km/h en 4,1 segundos. Por si no fuese poco, Mercedes también estrenó la versión C63 S; un modelo mejorado con 34CV y 50Nm más que logran un 0-100 en 4 segundos.
Finalmente, no fue hasta 2018 que Mercedes aplicó un restyling, y se lanzaron los actuales C63 y C63 S. Los cambios fueron en electrónica (transmisión mejorada, modos de conducción mejorados y un nuevo control de estabilidad), exterior (nuevas entradas de aire, nuevo difusor y salidas de escape) e interior con una nueva pantalla multimedia y asientos deportivos AMG. No obstante, los motores no variaron, aunque siguen siendo muy efectivos y versátiles.